La OTAN tras la Cumbre de Vilna
El 20 de julio de 2023, INCIPE celebró el evento virtual titulado La OTAN tras la Cumbre de Vilna, con la participación de Federico Torres Muro, embajador representante permanente de España en la OTAN. El encuentro fue presentado por el embajador y secretario general del INCIPE, Manuel Alabart. Tras la ponencia, se inició una ronda de preguntas moderada por Vicente Garrido, director general del INCIPE.
Federico Torres Muro comenzó su intervención señalando el éxito, en líneas generales, de esta Cumbre en la cual han participado los jefes de Estado y de Gobierno de los 31 miembros de la Alianza más Suecia, como estado invitado. Torres Muro explica, esta era una Cumbre que presentaba algunos retos coyunturales y tenía que responder a otros retos de carácter más estructural, con la mirada puesta en las dos grandes amenazas: la Guerra de Ucrania y el terrorismo.
A continuación, el embajador pasó a desgranar las tres sesiones que tuvieron lugar a lo largo de la Cumbre. La primera de ellas, de carácter interno, sirvió para aprobar los planes regionales que rigen las actividades de la OTAN. Además, se renovó el compromiso de inversión y defensa firmado en 2014, conocido como Compromiso de Gales, en el que se fijaba asignar el 2% del PIB a inversión en defensa. Se aprobó también el plan de acción para la promoción de la producción de la industria de defensa y un plan multianual de apoyo al sector de la defensa de Ucrania.
La segunda sesión se centró en los socios del Asia-Pacífico-4 (Australia, Corea del Sur, Japón y Nueva Zelanda) junto con los representantes de la Unión Europea. En ella se realizó un análisis de los retos y las amenazas al orden internacional. Se habló de China y de cómo la OTAN afirma seguir abierta a una relación constructiva, pero sin olvidar que hay elementos que preocupan a los aliados, como la carrera armamentística china o su relación con Rusia. Se habló también del hecho de que el concepto de seguridad y defensa está evolucionando en estos momentos; ya no puede tratarse de forma estrictamente geográfica, y hay que tratar nuevos dominios, como el ciberespacio o el espacio exterior.
En la tercera sesión, que contó con la presencia del presidente ucraniano Volodímir Zelenski, se constituyó el Consejo OTAN-Ucrania. Además, de forma paralela, se formalizó el acuerdo del G7, los conocidos como arreglos de seguridad, al que se adhirieron algunos aliados, España entre ellos. Los tres elementos fundamentales de estos arreglos consisten en: apoyo en el ámbito de la defensa, apoyo a la estabilidad económica de Ucrania y a la reconstrucción del país, y apoyo financiero y técnico para hacer posible el refuerzo de la agenda de buen gobierno de las autoridades ucranianas. Asimismo, Ucrania asume dos compromisos: fortalecer la transparencia e implementar reformas en su arquitectura institucional, fortaleciendo el estado de derecho, la democracia y el respeto a los derechos humanos.
Otro aspecto tratado en la Cumbre, en el que España tiene gran interés y que se ve reflejado en el párrafo 22 del comunicado, es la necesidad de reforzar la política de la OTAN hacia el ‘flanco sur’. Para ello se establecieron dos pilares fundamentales: fortalecer el diálogo político y reforzar las capacidades en materia de defensa.
Respecto al papel de España en esta Cumbre, Torres destaca el anuncio del compromiso de desplegar nuevas fuerzas en Eslovaquia y Rumanía, reforzando su contribución a la defensa colectiva, y su apoyo a Ucrania con el mencionado acuerdo del G7.
Al final de la sesión tuvo lugar un debate, en el que los participantes formularon algunas preguntas relativas a temas como el ingreso de Ucrania en la OTAN, y cómo no es previsible que este ocurra mientras dure la guerra. También se habló sobre el levantamiento del veto de Turquía a Suecia y la relación que este tiene con la lucha contra el terrorismo. Se debatió además sobre la ampliación de la OTAN hacia el este, sobre el gasto en defensa de España y la opinión pública, y finalmente sobre las perspectivas de cooperación industrial en la OTAN y la necesidad de coordinar y complementar estos esfuerzos con la Unión Europea.
Elena Ferro
INCIPE