Alemania, Europa y el Desafío de los Refugiados
INCIPE celebró el 16 de junio un Desayuno de Trabajo bajo el título Alemania, Europa y el Desafió de los Refugiados. Para este encuentro se contó con la participación como ponente de D. Heinrich Kreft, Ministro de la República Federal de Alemania en España.
Según el último informe publicado por Naciones Unidas, actualmente en el mundo más de 60 millones de personas se encuentran dentro del status de desplazado, lo que le define como una persona que se ha visto forzados a huir, incluso dentro de su propio país. Alemania es, entre los países del continente europeo, uno de los que presenta mayor número de refugiados, cuyas cifras se encuentran muy por encima que el resto de sus vecinos. En el año 2015 el Estado Alemán abrió sus puertas a más de un millón de refugiados y solo en los primeros meses de 2016 esta cifra ya alcanzaba los 173.000 individuos, los cuales provienen principalmente de Siria, Somalia, Afganistán y Pakistán.
Para que estas cifras no continúen en aumento es necesario que sean atajen las causas, ya que millones de personas solo desean lograr establecerse en una región más segura y mejorar su calidad de vida. Para alcanzar resultados Europa debe colaborar de manera unitaria en la resolución de los conflictos generadores de dichos desplazamientos masivos a través de estrategias políticas, económicas y humanitarias.
Recientemente se ha alcanzado un plan para aliviar la crisis de los refugiados, a través del acuerdo marco entre la Unión Europea y Turquía, aprobado en marzo de 2016. Su objetivco es claro: poner freno al trafico de personas, salvaguardando siempre el cumplimiento de los derechos humanos; una de las máximas prioridades para la República Federal Alemana. El acuerdo garantiza que cada persona identificada como refugiada su caso sea estudiado de forma individual y con las garantías humanitarias necesarias.
Otro aspecto necesario sería la creación de un mecanismo de reparto de refugiados, justo y equitativo entre los países pertenecientes a la Unión Europea que evalué las cargas sociales que cada uno pueda soportar. En este sentido, cabe destacar la gran ayuda que presta España en materia de re-ubicación de refugiados, además del excelente trabajo en gestión de fronteras.
Alemania, por su parte, está desarrollando e implementando programas para la integración de refugiados en la sociedad de acogida, a través de mecanismos como cursos para el aprendizaje del idioma, cursos de integración local, e incluso formación profesional para una inserción laboral y social.
El Desayuno de Trabajo contó con la presencia de miembros de diversos sectores como cuerpo diplomático, thinks tanks, militares y académicos, entre otros. Para finalizar el encuentro se dio paso a un turno de intervenciones entre los asistentes, donde se pusieron de relieve distintas perspectivas cómo la búsqueda de posibles soluciones para la actual crisis de los refugiados.
Martina Ros
INCIPE
